Hablemos de copas…
Existe una amplia variedad de estilo de copa, algunas más grande o pequeña, con el balón más o menos amplio, la boca más o menos estrecha, el tallo más corto o más largo. Y aunque no lo creas estos detalles debes tenerlos en cuenta a la hora de catar un vino. Por eso te enseñaremos a elegir la copa adecuada para cada tipo de vino.
Pero antes descubriremos cómo ciertas características de las copas influyen sobre la forma en la que percibes el vino.
- El tamaño: Puede influir principalmente en la calidad y la intensidad aromática. Por ejemplo, para vinos jóvenes y con notas frutales, y los vinos tintos de reserva es recomendable copas de mayor tamaño, para que haya más espacio para oxigenarlos y así despertar aromas escondidos.
- El diámetro del borde: Es la parte de la copa que definirá la a inclinación de la cabeza a la hora de ingerir el vino, y según esta llevaremos el líquido hacia una zona de la lengua u otra, dónde se perciben los sabores dulce, ácido, salado o amargo.
- El cristal: ¿Te has preguntado cuál es el grosor ideal de una copa? El cristal fino e incoloro es el más conveniente, ya que ofrece una visión más nítida del color del vino y hace la sensación táctil entre el paladar y la copa mucho más grata.
- El tallo: Este elemento es uno de los más importantes, ya que el tallo debe ser suficientemente largo como para sostener la copa sin tocar el balón de la misma, ya que si sostenemos la copa con la mano en esa zona el vino blanco por ejemplo se calentará muy rápido, y podemos afectar su sabor.
Ahora bien. ¿Qué tipo de copa funciona mejor para cada vino?
La magia de esta copa reside en su capacidad para realzar la gama completa de aromas y sabores que ofrecen los espumosos y el champagne, mientras conservan su elegante efervescencia.
La copa perfecta para vinos tintos con cuerpo, elevada acidez y tanino moderado. Dirige el vino a la parte de la lengua donde se percibe el sabor dulce, realzando su carácter frutal y suavizando su acidez. Su amplio balón destaca los matices aromáticos.
Su balón amplio facilita la oxigenación del vino, y el diámetro del borde lleva al vino hacia la parte de la lengua que percibe el sabor dulce. Por lo tanto, es recomendada para vinos tintos jóvenes, con cuerpo y complejos.
Con esta copa el vino va dirigido a la punta de la lengua para destacar la fruta y reducir la acidez. Es recomendada para vinos blancos.
Ahora que ya sabes como elegir la copa adecuada para cada vino, sólo te queda poner en práctica esos conocimientos catando los mejores vinos de España, artesanos, ecológicos y de pequeños productores. Descubre la variedad que tenemos disponibles en nuestra web y tienda física.